La ‘bigtech’ destinará 10 mil mdd a descarbonizar sus centros de datos hacia 2040; “cualquier regulación que dificulte el uso de fuentes renovables nos retrasa”, dice.
Google proyecta invertir al menos 10 mil millones de dólares en contratos para proveer de energía limpia a todas sus oficinas, instalaciones y centros de datos hacia 2040 en los 80 mercados donde tiene presencia ―incluido México, donde ya anunció este año la construcción de un data center―, con el fin de reducir a cero sus emisiones de carbono al medio ambiente.
En entrevista con MILENIO, Amanda Peterson Corio, directora global de energía limpia en data centers de la bigtech que forma parte de Alphabet Inc., destacó que el centro en México apenas se anunció en febrero, por lo cual aún no tienen proyecto o convenio en el país.
“Estamos en fase de planificación. Por tanto, no tenemos una carga qué mitigar. Una vez que se realicen, pondremos esos proyectos directamente en línea en México”, explicó.
Desde 2022, Google ha destinado más de 4 mil millones de dólares en casi 20 acuerdos firmados para agregar aproximadamente 2.8 gigavatios en capacidad de generación de energía limpia a la red para 2026.
“Empezamos a comprar energía limpia en 2010, y desde entonces nuestro compromiso y objetivos son los mismos, que es poner la misma cantidad de nueva energía limpia adicional en la red de lo que consumimos globalmente. Y en ese momento, realmente nos enfocamos en lograr esa misión”, expuso la directora.
De forma acumulada, de 2010 a 2022, firmaron más de 80 acuerdos por un total de aproximadamente 10 gigavatios de capacidad de generación de energía limpia, el equivalente a más de 31 millones de paneles solares.
Peterson Corio expuso que ya desde 2017 lograron cubrir ciento por ciento sus necesidades de energía de fuentes renovables, pero conforme van creciendo requieren sumar potencia.
“El año pasado fue nuestro sexto año de continuar cumpliendo esa meta. Y eso es importante porque seguimos creciendo. Así que cada año aumentamos nuestra energía o el uso anual de energía en aproximadamente 20 por ciento”, expuso.
La directora global de energía limpia apuntó que incluso, por esta decisión de seguir creciendo, la cifra de 10 mil millones de dólares para contratos de energía puede crecer conforme se vayan sumando proyectos de centros de datos para sus servicios.
Peterson Corio apuntó que uno de los principales desafíos que enfrentan con la contratación de energía limpia es la transmisión, misma que no es suficiente para ayudarlos a cubrir sus objetivos.
“Las complicaciones con la construcción de grandes líneas de transmisión a través de las fronteras estatales, de las fronteras entre los países, debido a la geopolítica o la política interna que están involucradas, está ralentizando todo. Creo que ese es el desafío número uno”, apuntó.
Agregó que el hidrógeno es otro energético que puede ayudar a transportar potencia limpia a diferentes sitios, pero también requiere infraestructura.
Otro problema que detecta es la situación regulatoria. “Estamos operando en más de 80 mercados diferentes. Entonces, cualquier estructura regulatoria que realmente dificulte la compra de energía limpia, ya sea como usuario final, nos retrasa”, apuntó.