El ejercicio puede hacer más por nuestra salud que los medicamentos. Hacer ejercicio no tiene porqué plantearse como algo sacrificado, sufrido o incluso intimidatorio. No hay que ser un atleta ni un deportista profesional para recibir los beneficios del ejercicio físico.
Algunas de las mejores actividades físicas para nuestro cuerpo no requieren ir a un gimnasio ni necesitan de un entrenamiento tan intenso como para correr una maratón, y son actividades agradables que pueden mejorar nuestra salud, por ejemplo, ayudando a mantener un adecuado peso corporal, mejorar el equilibrio y la flexibilidad, a fortalecer los huesos y proteger las articulaciones
1. NATACIÓN
Nadar puede considerarse el entrenamiento perfecto. La flotabilidad del agua sostiene el cuerpo y quita la tensión de las articulaciones dolorosas para que se puedan mover con más fluidez. “Nadar es bueno para las personas con artritis porque es menos pesado”, explica la Dra. Lee. Recientes investigaciones han descubierto que la natación también puede mejorar el estado mental y ponernos de mejor humor. El aeróbic acuático es otra opción. Estas clases ayudan a quemar calorías y tonificar.
2. ENTRENAMIENTO DE FUERZA
Si crees que el entrenamiento de fuerza es una actividad machista y musculosa, piénsalo de nuevo. Levantar pesas livianas no aumentará los músculos, pero los mantendrá fuertes. Si no usamos los músculos, perderán su fuerza con el tiempo.
El músculo también ayuda a quemar calorías. “Mientras más músculo se tenga, más calorías se quemarán, por lo que es más fácil mantener el eficaz peso”, explica la Dra. Lee. Al igual que otros ejercicios, el entrenamiento de fuerza también puede ayudar a preservar la función cerebral en los últimos años.
3. CAMINAR
Caminar es simple, pero eficaz. Puede ayudar a mantenernos en forma, mejorar los niveles de colesterol, fortalecer los huesos, mantener la presión arterial bajo control, levantar el ánimo y reducir el riesgo de una serie de enfermedades (diabetes y enfermedad cardíaca, por ejemplo). Varios estudios han demostrado que caminar y otras actividades físicas pueden incluso mejorar la memoria y resistir la pérdida de memoria relacionada con la edad.
4. EJERCICIOS DE KEGEL
Estos ejercicios no nos ayudarán a vernos mejor, pero hacen algo igualmente importante: fortalecer los músculos del suelo pélvico que sostienen la vejiga. La fortaleza de los músculos del suelo pélvico es fundamental para la prevención de la incontinencia. Si bien muchas mujeres están familiarizadas con los ejercicios de Kegel, estos ejercicios también pueden beneficiar a los hombres.
Muchas de las cosas que hacemos por diversión (y trabajo) cuentan como ejercicio. Arreglar el jardín cuenta como actividad física. También lo hace el baile de salón o jugar con los hijos o nietos. Siempre que se esté haciendo algún tipo de ejercicio aeróbico durante al menos 30 minutos al día, y se incluyan dos días de entrenamiento de fuerza a la semana, podemos considerarnos una persona “activa”.
5. CAMINA RAPIDO
“Una buena alternativa a correr es caminar rápido“, apunta. Igualmente Lina Velikova, médico experta en inmunología, también recomienda esta forma de hacer ejercicio porque “ayuda a la salud cardiovascular y es también beneficiosa para la salud mental”.