Es fundamental un estilo de vida saludable para reducir la susceptibilidad y las complicaciones a largo plazo del COVID-19.
En la pandemia por COVID-19, la nutrición es uno de los pilares fundamentales en la lucha contra la infección; los pacientes requieren apoyo nutricional especializado tanto para evitar infecciones severas como para recuperarlos después de las mismas, si finalmente se presentaran.
La pandemia causada por este virus es un evento sanitario que, sin duda alguna, ha cambiado nuestras vidas irremediablemente. Al mismo tiempo nos ha enseñado que un estilo de vida no saludable, siempre nos traerá complicaciones.
El virus ataca con particular agresividad a personas con el sistema inmunológico deprimido, a personas con problemas de obesidad, diabetes mellitus y/o hipertensión, en estas condiciones el estado nutricional es pieza clave. En la mayoría de estas, la enfermedad es causadas por malos hábitos alimenticios y una vida sedentaria.
Por ello es importante mejorar hábitos alimenticios, aumentar el consumo de frutas y verduras, comer la cantidad y calidad correcta de carbohidratos, grasas y proteínas, disminuir el consumo de comida poco saludable, así como también hacer ejercicio, y tener una salud emocional óptima.
Consulta con tu NUTRIÓLOGO para que te oriente en materia de alimentación, ya que no solo se enfoca en bajar de peso. Nutrición no es sinónimo de comida nada más, es nutrir al organismo, a cada célula, aportando los nutrientes necesarios para tener una vida saludable.
No bajes la guardia, sigue cuidándote y cuidando de los tuyos, aliméntate sanamente y haz ejercicio.
