Al momento de iniciar la presente opinión, la cual versa sobre la prioridad que debiera existir entre realizar una magna inversión de infraestructura municipal, y las vidas que muy seguido se pierden en un municipio por falta de esta misma, ello a costa de la imprudencia ciudadana principalmente, creo no se debiera sopesar en lo absoluto, si inclinarse a realizar una sentida y necesaria obra pública, o dedicar ese recurso a otras obras de relativa menor importancia.
Desgraciadamente en estos momentos de redacción, se reporta en las redes sociales que el H. Cuerpo de Bomberos de esta ciudad, luego de más de 60 horas de búsqueda incesante, localizaron desgraciadamente sin vida el cuerpo del pequeño Horacio, de tan solo 8 años de edad; quién desde el pasado viernes en la mañana, cayera a las hoy caudalosas aguas del Canal Las Pilas, cuando en compañía de su pequeña hermana se dirigían a la tienda de la colonia Buenavista, a realizar un mandado familiar.
No entraré en cifras económicas ni financieras porque no sería el caso central, la obra a la que me refiero, y que en algún momento se la escuché a un candidato en campaña, es al embovedado del hoy mal afamado “Canal de Las Pilas”, ese conducto de agua que parte casi en 2 a nuestra ciudad y que tantas vidas humanas y de animales domésticos ha cobrado; tan solo en los últimos 5 años, se han perdido las vidas de 10 infantes, de un total de 49 vidas humanas que perecieron ahogadas en esas aguas citadinas.
Desgraciadamente en esta ocasión cobró la vida de un pequeñito navojoense, y deja con un dolor inmenso a su familia y a toda una ciudad, que siempre estuvieron pendientes del caso y me atrevo decir que con la oración en su mente para que se le encontrase con vida, cosa que desgraciadamente no sucedió.
Cosa grande sería que el Alcalde Mario Martínez Bojórquez, conociendo su vocación política, social, altruista y hasta religiosa, dejara de lado, aunque sea de manera momentánea alguna inversión de relumbrón ciudadana, y retomara la propuesta de ese embovedamiento, cuando menos de inicio y por etapas, en el trayecto del caudal que cruza sobre colonias tan populares y populosas de infantes y adultos mayores.
En dicha plancha de concreto se puede construir un gran espacio de entretenimiento, esparcimiento y de ejercitación física por parte de los ciudadanos navojoenses.
Podría contar con múltiples áreas de aparatos de acondicionamiento físico, una gran vía para caminata y trotamiento amateur; podría también contar con espacios de degustación tradicional, como son refresquerías, neverías, espacios con venta de antojitos mexicanos, espacios culturales y un largo etcétera que se pudiera incluir en ese trayecto de casi 6 kilómetros aproximadamente.
La citada obra iniciaría en el sector donde empieza el casco urbano en la Col. Buenavista y terminaría debajo de los puentes elevados al cruzar la Av. Pesqueira Sur en la Col. Juárez. Imagine usted apreciable lector, lo bien que se vería todo ese trayecto arreglado de manera tradicional o moderna, como usted prefiera; dando vida a un gran punto de reunión familiar y de convivencia, pero sobre todo, teniendo la certeza de que en ese espacio, no volvería a suceder alguna tragedia como hoy enluta a no solo una familia navojoense, sino a toda la ciudad misma.
Dejamos en este espacio la propuesta ciudadana al Sr. Alcalde y su Cabildo en pleno, para que en verdad la consideren, créame que aunque sea una enorme obra de infraestructura y una muy alta inversión Señor Presidente, seguro esté que el costo político es nulo, y el beneficio social será muy grande; puede ser la firma social de este su trienio, que créame pasará a la historia de Navojoa (recuerde la magna obra del actual Blvd. Centenario en su momento, hoy todo un corredor comercial de alta plusvalía).
No dejemos que estas tragedias sean parte de la normalidad contemporánea a la que nos estamos acostumbrando.
Veremos si el tiempo nos dá la razón… Tiempo al Tiempo!!!
L.C.C. LUIS H. BALLESTEROS LAGUNA