Tras una intensa sequía de más de 15 meses, los campos agrícolas y el sector ganadero de Sonora resultaron beneficiados con la temporada de lluvias del 2021, la cual se estima sea superada en 2022.
Las proyecciones prevén que este año se registren entre 60 y 65% más de precipitaciones que las presentadas en 2021 debido al fenómeno de La Niña.
Históricamente, los agricultores y productores pecuarios de la región han enfrentado la ausencia de lluvias y las altas temperaturas con diversos mecanismos que contribuyen a un manejo adecuado tanto de hortalizas como de agostaderos.
El año pasado fue durante el segundo semestre cuando mejoró el panorama, ya que los mantos acuíferos recibieron una alta recarga de agua lo que garantizó un ciclo agrícola favorable, así como pastizales para mantener el hato ganadero por varios meses.
A pesar de esta situación y ante los pronósticos positivos para 2022, los productores continúan tomando medidas para sacar adelante sus cultivos y ganado con la finalidad de evitar una crisis derivada de la sequía.
Agua, un factor indispensable para los cultivos
Javier Ruvalcaba Esquer, asesor agrícola y especialista de la empresa Crown Jewels, comercializadora de frutas y verduras de exportación con destino a Estados Unidos y parte de Canadá, señaló que lo principal que deben tener en cuenta es la previsión y ahorro de agua.
Recordó que aunque las lluvias de 2021 fueron favorables, no fueron suficientes para asegurar una mayor producción, por lo que este año es importante que los productores cuenten con una estrategia tomando en cuenta diversos factores, como el fenómeno de La Niña y los huracanes.
Fuente: ESDH