Un sube y baja de emociones fue lo que se vivió en la cancha del Santiago Bernabéu en la vuelta de los Cuartos de Final de la Champions League, donde el Real Madrid sudó sangre para poder obtener su boleto a las Semifinales a costa del actual campeón de la competición, el Chelsea.
El partido terminó con marcador de 3-2 en favor del Chelsea, pero el global favoreció 5-4 al Real Madrid de Carlo Ancelotti que consigue así su pase a las Semifinales en donde se medirá al ganador de la llave del duelo entre Manchester City y Atlético de Madrid.
El conjunto merengue inició el partido con cierto titubeo y lo pagó caro, pues apenas a los 13 minutos de partido, Timo Werner metió una asistencia para que en los linderos del área recibiera Mason Mount quien tras una buena recepción, colocó el esférico lejos del alcance de Thibaut Courtois.
El Chelsea trató de mantener la inercia y un ritmo frenético que comprometía la cabaña blanca una ocasión sí y la otra también. Fue al minuto 51 cuando encontraron recompensa, luego de un tiro de esquina en el que, libre de marca, Antonio Rudiger puso el 2-0 (3-3 global).
Con el desconcierto de la zaga merengue, llegó Timo Werner para poner el 3-0 (4-3 global) luego de un jugadón en el que dejó a Casemiro y Carvajal en el piso antes de mandarla al fondo de las redes.
Noqueado, en la lona, pero con pulso, el Real Madrid se levantaría de la mano de Luka Modric, quien puso un poema de pase con tres dedos al corazón del área, para que Rodrygo al minuto 80 le devolviera la vida al Madrid y al Santiago Bernabéu, como si de una desfibrilación se tratara.
Ya en tiempos extras, con el partido con 3-1, el Real Madrid venido arriba, hizo una presión alta en la que Eduardo Camavinga logró recuperar el balón casi al borde de la línea de banda y puso un pase al espacio para que Vinícius Jr explotara su velocidad, se internara en el área y con gran serenidad cuchareara el balón para que Karim Benzema con un testarazo sacudiera las redes del conjunto londinense y pusiera el 3-2 definitivo (5-4 global).
El Real Madrid vuelve a dar muestras de que, para vencerlo, hay que matarle deportivamente hablando. Su ADN y la mítica frase de “Hasta el final, Vamos Real”, se refleja siempre en el campo y en una noche de Champions como esta, se confirma que los merengues son un serio candidato a pelear por la “Orejona”.
informador