El mundo del espectáculo este día recuerda con gran tristeza a la talentosa y difunta cantante, Selena Quintanilla, a 27 años de su partida, vida que le fue arrebata a la ‘Reina del Tex-Mex’ de esta cruel forma a manos de quien consideraba su amiga.
Quintanilla, un día como hoy, 31 de marzo pero de 1995, lamentablemente fue asesinada a manos de quien consideraba su amiga, la presidente de club de fans, socia y gerente de boutiques, Yolanda Saldívar, cuando solo tenía 23 años de edad.
La joven cantante fue de las estrellas más brillantes y amadas en las décadas de los 80 y 90, con uno de los futuros más prometedores dentro de la música y en los negocios, pues poseía una gran voz, excelente bailarina, diseñadora de modas y empresaria.
Selena comenzó su carrera desde que solo era una niña, contando con el absoluto apoyo de su padre, Abraham Quintanilla, el cual comenzó una banda con sus hijos, la cual saltó a la fama internacional con el tema Como la Flor, consolidándose con Bidi Bom Bom, o Carcacha.
La joven era tan querida que este día se considera como uno de los más trágicos para el mundo del espectáculo y todo un mes su muerte dio de que hablar, y aún en la actualidad su legado perdura con memoriales, tributos familiares y de fans, además de que existe el filme, protagonizado por Jennifer Lopez, y una serie en Netflix producida por su familia, para contar su historia y revelar secretos, convirtiéndola en alguien inolvidable.
Uno de los temas que año con año dan de que hablar en estas fechas, fue la manera en la que falleció, pues ocurrió a manos de Saldívar en una habitación de hotel en el Days Inn de Corpus Christi, Texas, donde presuntamente organizó una reunión para encarar una malversación de sus bienes, por lo que esta le disparó.
El padre de la cantante del Chico del Apartamento 512 explicó que fans llamaron reclamando por mercancía que pagaron y no recibieron, por lo que se investigó y se descubrió que había malversado alrededor de 60 mil dólares, hecho que presuntamente hablaron en dicho lugar.
Fuentes narran que después del disparo, Selena logró huir y llegar al vestíbulo del hotel, donde los servicios de emergencia la atendieron, y según el gerente del hotel, antes de que ella cayera inconsciente ella dijo que fue “Yolanda, habitación 518”. Pocas horas después en el hospital la declararon con muerte cerebral.
No tenía evidencia de función neurológica. No había evidencia de ningún flujo de sangre en su cerebro. Su cerebro no estaba funcionando. Estaba clínicamente con muerte cerebral”, dijo el médico Louis Elkins.
